No hay fallo tuyo, obvio que te des por aludido cuando menciono lo de los fuegos artificiales del Four Seasons y lo meto en el pack general del post.
Lo de la estación de Chamartín volverá a aparecer porque ese hilo va para largo. Yo critico ahí el diseño del proyecto, que me parece malo, banal y que en términos arquitectónicos no aporta nada.Y en técnicos, que los andenes de una estación de ese calibre y con la pomposidad que le dan al área comercial, los dejen con marquesinas de apeadero de periferia, cosa que a ti no te parece mal.
Curiosamente, esos renders de concurso están muy muy definidos, y con las nuevas imágenes aparecidas se corrobora que así se queda más o menos.
Y paro ya, que me estoy poniendo serio y no me gusta. Nunca hablo completamente en serio.
Pues no, no me doy por aludido, aunque lo intentes. Y si, mejor dejarlo aquí, que yo no entro en este foro para entrar en conflicto con nadie ni me gusta. Para eso ya hay cosas más importantes en esta vida.
Lo de fijarse en lo positivo de Barcelona y en lo negativo de Madrid, se llaman ganas de mejorar.
Si nos fijamos en lo negativo de Barcelona, para que nos vale? Para decir que Lavapiés está mal pero el Raval peor, así que no pasa nada?
Si nos fijamos en lo bueno de Barcelona, y lo comparamos con equivalentes de Madrid que desde nuestro punto de vista están peor, no es sino por destacar que hay otra forma de hacer las cosas.
Ese triunfalismo ensimismado muy habitual en el foro me parece una huida hacia adelante.
Yo soy positivo. Aguardo esperanzas para que con el resultado final (sabiendo lo que ya sé que no tendrá y lo que me hubiera gustado), no me desagrade del todo o incluso me guste (ojalá sea mucho -no creo -). Aquí se habla en términos muy duros, que no comparto, y que dejando a un lado el tema de los plazos, organización y cambios que se han ido sucediendo… viendo lo poco que se ha ido mostrando por aquí y en otros videos, bastante correcto. Para mi lo duro fue el giro de 180 que se hizo con Plaza España (solo la Plaza, ojo) cambiándolo por otra cosa totalmente distinta y peor (en mi opinión), pero por suerte creo que con Sol esto no va a ser lo mismo.
El compañero habla de analizar obras y diferentes actuaciones. Yo creo que se puede hacer exactamente igual, con el mismo espiritu crítico sea una actuación en Madrid, Barcelona o Bilbao.
En cambio sí entiendo que se cojan ejemplos de lo bueno de otra ciudad para fijarse e incluso querer mejorar lo mejorable. No comparto la opinión de los que les molesta ese sano y serio ejercicio comparativo. Pero creo que no se refiere exactamente a eso.
Coincido bastante. Lo de Plaza España no tiene nombre, no tengo calificativos suficientes para ese horror, pero creo que en Sol, con sus defectos, vamos a tener un resultado mil veces mejor y va a resultar un espacio bello.
Llevo toda mi vida viviendo en Madrid salvo un año de Erasmus, fuera y dentro de la almendra central y del distrito Centro. Mi familia es de Madrid y no tengo otro punto de referencia en España con el que identificarme (no tengo pueblo).
Podría:
a) Odiar irracionalmente el único lugar en el que he vivido toda mi vida y en el que probablemente siga (o eso dice mi hipoteca) porque me gusta ser un desgraciado.
b) Amar irracionalmente el único lugar en el que he vivido toda mi vida y en el que probablemente siga (o eso dice mi hipoteca) porque reafirma mi realidad.
c) Dedicar mi tiempo en mis frecuentes viajes y en foros de Internet a entender como se hacen las cosas en otros sitios porque me gustaría eso para el lugar donde vivo, y, por qué no admitirlo, sentir envidia de vez en cuando.
Yo tengo claro cual es mi opción, no sé si es la más fácil, aunque es lo que me ha tocado.
Yo haría lo mismo, si la estatua va a seguir estando en Sol no le veo sentido a que ponga esa fecha, otra cosa es que ponga: desde 1967 en Sol, pero vamos que mejor quitar lo que hay puesto y no poner nada, me parece que no queda bien.
Desde el comienzo de las obras pensé que lo primero debería haber sido el traslado de todas las estatuas antes de enlosar porque si no iba a quedar destrozado por las grúas.