Películas, series, publicidad… El palacio de Buckingham o Versalles los tenemos hasta en la sopa… La gente busca lo que le muestran.
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Una restauracion de fachadas y que vuelva a destacar con su piedra blanca resplandeciente, seria un primer paso
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Han publicado la colección Franzen. Viendo esta imagen a uno se le cae el alma a los pies. De esta imagen…a un parking de coches en 2021. En el mismo lugar. Sin palabras.
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La mitad de las salas nobles del palacio no se pueden visitar y está prohibido hacer fotos en casi todas las salas. Y que se suban fotos a las redes es una de las mejores formas de publicidad hoy en día.
Eso le resta mucha fama.
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Comparación entre los placios reales de Juvarra, Sacchetti y Sabatini para Madrid y Vanvitelli para Caserta. DNA estudiio.
El palacio de Madrid resulta muy pequeño en comparación con el de Caserta si se comparan las plantas. Otra cosa es la altura del palacio madrileño, incomparable con la de otros palacios europeos.
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A los proyectos para Madrid que cita el compañero @gromiko, quisiera añadir uno muy desconocido pero que me parece fascinante, tanto por su personalidad como por su originalidad, y porque además es de uno de mis arquitectos fetiche. Es el que propuso Pedro de Ribera:
El arquitecto propuso algo atrevido y recargado, más alejado de las corrientes afrancesadas e italianizantes que empezaban a dominar.
Me fascina tanto la fachada como la inusual planta de cruz griega.
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Yo creo que sí estarán tomando nota. Estarán viendo cuántas de esas estancias pueden seguir llenando de funcionarios.
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Y por qué no pueden meter más coches…
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Volviendo al tema de la restitución de las esculturas de los reyes, en el proyecto de Juvarra ya aparecía esta solución de coronación.
Propuestas de Bernini para el Louvre
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- A mí lo de acabar el ala gemela al ala de san Gil me parece bien, siempre que se conserven las piedras y se reutilicen en la ampliación las piedras de la fachada que están en el espacio que quedaría afectado por la ampliación.
Se me ocurre que el nuevo ala construida podría utilizarse para recrear espacios del palacio que ya no existen pero que pueden volver a hacerse porque se conservan los elementos, como el ya comentado dormitorio de Carlos III. O de lo contrario utlizarlo como despacho de funcionarios y que las recreaciones de espacios se hagan en espacios hoy ocupados por esos despachos. Creo que no hay que tener miedo a construir algo que estaba en el proyecto original y se hubiera hecho de no haber sido por crisis económicas. Por ejemplo, en Versalles en 1985 se acabó la llamada escalier de Gabriel que se proyectó originalmente en el siglo XVIII y que no se llegó a temrinar. - Lo de llevar arriba las esculturas de los reyes me parecería un puntazo. Le devolvería ese aire tan barroco y monumental.
- También me parece genial unir los jardines de Sabatini y el campo del moro, sobre todo ahora con la peatonalización de la calle Bailen. Además, yo aprovechaba y demolia algunos edificios que ya no tienen uso como el viejo museo de coches y aprovechaba para recuperar el proyecto original del campo del moro, que aunque más o menos fue el que se siguió no se hicieron algunas partes como un gran estanque que estaba proyectado.
- También es un puntazo lo que se va a hacer de facilitar la conexión campo del moro-casa de campo vía túnel de bonaparte. Especialmente cuando también se va a recuperar el jardin del reservado de la casa de campo. Da para un complejo monumental de 1a categoría
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Respecto a lo de criticar a Patrimonio Nacional, entiendo la frustración de la gente porque se enseña muy poco de lo que pudiera enseñarse, como el ala an gil o el dormitorio de la reina maria luisa. Pero creo que no por ello hay que recurrir a tópicos espurios de funcionarios vagos y mantenidos porque me consta que si no se abren más espacios no es por pereza, sino por falta de medios. Si en vez de destinarse dinero a ciertas cosas hubiera verdadera voluntad política de invertir en cultura y mostrar este patrimonio se haría.
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El dormitorio de Carlos III deberían montarlo en la estancia donde estaba, que está incluida entre las salas que actualmente se visitan. Aparece en las guías como “Salón de Carlos III”, aquí murió el 14 de diciembre de 1788. Fue Fernando VII el que quiso emplear la estancia para rendirle homenaje para lo que utilizó una decoración que aludía a la Real y Distinguida Orden de Carlos III. Los colores blanco y azul dominan la decoración y el mobiliario. Las cenefas de los paños que tapizan los muros hacen referencia al número III, la cifra del Rey Carlos III.
Fuente Foto
Si no estoy mal informado, la cama se conserva y se pudo ver en la exposición temporal de PN “Carlos III, Majestad y Ornato”.
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Carlos III: dos camas para la muerte del rey ilustrado
https://www.revistaadios.es/articulo/33/carlos-iii-dos-camas-para-la-muerte-del-rey-ilustrado.html
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Exacto @Benfer, se conserva la cama.
Bueno, para ser exactos, más que la cama lo que se conserva es la “ropa de la cama” es decir, las tapicerías de la cama. El mueble en si, la cama, no se conserva porque no era más que un armazón de madera, travesaños, que iba oculto por esos tapices. No era una cama “esculpida”, sino “vestida”.
Todas las tapicerías, las de los muros, cortinas, cama, y las que recubrían sillas, sillones y canapés, sol de lana en colores, sobre fondo color “piedra venturina”, se tejieron según cartones del italiano Guillermo de Anglois, y a la marcha de éste a su país, los cartones restantes fueron pintados por José del Castillo.
Se ha podido reconstruir el mueble, la Cama de Carlos III por las medidas de los inventarios y sobre todo porque existen los tapices de la cama, que dan la medida.
Pero el dosel actual no es el original. Ni son esas piezas de tapicería ni son esas medidas.
Parece que podría ser éste dosel con éste tapiz, ambos regalados tiempo después a la catedral de Santiago de Compostela:
Aquí unas fotos que hice en diciembre de 2017 en la exposición de Carlos III que has citado: Con la cama “buena” y el dosel “malo” 
El tapiz de un canapé del dormitorio.
Se conservan varios sillones con la tapicería. He visto dos en un cuartucho de paso sin decorar, justo antes de llegar al camón de la escalera (donde está la estatua sedente de marmol de Carlos IV) pero no me dejaban hacerles fotos. Deben ser los que marco en amarillo
en una foto más abajo.
Y almacenados hay más sillones y sillas con sus tapicerías.
Cuando vi aquellos dos sillones de cerca, me recordaron en tamaño y en sus formas a los del salón de Gasparini. Me pareció increible que esas dos reliquias del dormitorio estén así arrumbadas en ese pasaje tan feo y oscuro.
Aqui pongo una foto de internet con la cama u algunos de los cuadros de Mengs (pintor tan aburrido como Carlos III, que lo idolatraba). Todos los cuadros del dormitorio eran de Mengs, salvo dos cuadros ovalados de la Virgen y Jesús, que están hechos con micromosaico.
El problema es que Alfonso XII “el mutilador”, al volver del exilio en París, trajo consigo el recuerdo de la moda decorativa más actual de París y del Londres victoriano, y quiso modernizar totalmente el palacio de sus antepasados.
Y en su campaña de “modernización”, decidió destruir toda la decoración auténtica barroca para hacer pastiches artificiales por todos sitios (neobarrocas algunas salas, neo platerescas otras, neo-Luis XIII otras, neo-Luis XIV otras) y quiso hacerse un dormitorio con las colgaduras (los tapices) que revestían las paredes y la cama de Carlos III y que estaban cuidadosamente guardados en los sótanos desde la destrucción del dormitorio, cuando Fernando VII.
Alfonso XII provechó algunos de los tapices de la cama y mandó “recortar” (sí, tal cual) algunos de los de los muros y de alguna de las cortinas de las ventanas para hacerse cortinajes para su nueva cama esculpida al estilo Luis XIII francés, con un dosel diferente al que tuvo la de Carlos III.
En amarillo, dos sillones originales del dormitorio de Carlos III.
En rojo, varias colgaduras cortadas por la mitad sirviendo de cortinas.
En verde dos cómodas del dormitorio de Carlos III.
Trozos cortados por la mitad (supongo que las cortinas de Alfonso XII) decoran desde los años 40 del siglo XX, sobre seda amarilla, la Saleta Amarilla, antiguo dormitorio del maldito Fernando VII.
Uno de los tapices cortados, con los trozos juntos (que no cosidos), para la exposición de Carlos III.
En definitiva, se conservan todas las colgaduras pero algunas tendrían que ser recosidas, pues fueron partidas.
Y hasta el día de hoy Patrimonio Nacional no se ha decidido a hacerlo.
La chimenea original se conserva pero fue trasladada a otro salón. La actual es del siglo XIX.
En la bóveda, en lugar del fresco actual en honor de Carlos III, había estucos chinescos, al estilo de los del salón de Gasparini.
Lógicamente en caso de restituir la habitación, de Carlos III los frescos actuales no se tocarían, porque además de que no hay dibujos de esos estucos desaparecidos, el fresco actual es muy valioso.
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A la misma escala
Versalles
Schonbrunn
Buckingham
Oriente
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Yo lo destinaría a un gran salón para actos oficiales, un salón tipo de los espejos de Versalles, pero en línea decorativa de nuestro Palacio Real, hay muebles, tapices, cerámica y pinturas únicas.
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Respecto a modificar los actuales salones, como el de Carlos III, no lo veo bajo ningún concepto, ya esos salones se utilizan para actos oficiales, es un palacio vivo, y no me imagino pasar por un dormitorio para ir al Salón del Trono, comedor de gala…
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Estoy de acuerdo. Hay funcionarios muy válidos, hay otros menos y otros mediocres. Lo que sí le falta, a capazos, a PN es AMBICIÓN y doblar presupuestos para financiar restauraciones. Creo que ésta es, junto el Prado, instituto Cervantes y el Real, la institución pública más valiosa de la nación. Los bienes que gestiona PN son estandarte de la cultura española. Pero optamos por la discreción y el perfil bajo. Y es un error.
Ambición:
Restauración íntegra de los jardines históricos ( La Granja, el Pardo, Aranjuez y del Moro)
Reposición de todos los remates escultóricos del Palacio Real
Reconstrucción del Palacio de Valsaín ( un puñado de ruinas)
Apertura inmediata de Colecciones Reales.
Convenio con el Arzobispado: la Almudena sede del Museo Nacional de Tapices ( como se hizo en la boda del actual Rey)
Apertura de todas las estancias del palacio real ( visitas restringidas con número máximo pero disponible, como ocurre en la Alhambra Nocturna)
Recuperación de TODOS los interiores afectados por el incendio del Palacio de la Granja en 1918.
Festival de música clásica internacional en los jardines de la Granja en verano.
Ambición. Ambición asociada al poderío que desprenden estos lugares.
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No te falta razóm, @Arcangel, el palacio sigue vivo.
Pero en época de Carlos III el dormitorio del rey era el salón de reuniones más importante de todo el palacio. Las tertulias familiares, las reuniones con los embajadores, algunas reuniones de ministros, se hacían en el dormitorio. Si eras un príncipe, un embajador o alguien “importante”, el rey te recibía, con su familia, en su dormitorio.
De ello da fe el que hubiera en el dormitorio del rey en época de Carlos III, a la misma vez, dos juegos completos de mobiliario de asiento en el dormitorio (taburetes, sillas, sillones, canapés). Uno tapizado de invierno (con las tapicerías de lana que he puesto antes en otro mensaje) y otro tapizado de verano, de seda “chinesca” amarilla.
Había asientos para una multitud de personas. Y muchas en pie.
El dormitorio era el salón final en la ceremonia ante los invitados. Era mucho más importante que el salón del trono, que era solamente el 4º salón en el recorrido oficial, era un simple salón de “besamanos” de camino al “sancta sanctorum”, al Dormitorio del Rey.
No veo mal que los turistas vean el dormitorio tal cual fué. Su importancia ceremonial en el siglo XVIII fué enorme.
Como en Versalles se visita actualmebte el dormitorio de Luis XIV, que está por cierto en el centro exacto del palacio de Versalles. Pienso que así debería ser en nuestro Palacio Real.
El actual salón que Fernando VII creó en el antiguo dormitorio de su abuelo Carlos III (el -actual salón de Carlos III) nunca tuvo como tal gran importancia. Y la “orden de Carlos III”, para cuyas ceremonias se hizo toda esa mutilación y redecoración se reunió pocas veces. Es una sala bastante inútil desde su origen.
En época de Fernando VII ya no había la rígida etiqueta de antaño y el dormorio de un rey era para dormir. El que se hizo Fernando VII era pequeño y más bien feo (estuvo en la actual Saleta Amarilla). Y el antiguo dormitorio de Carlos III (ya convertido en Salón de Carlos III) era una habitación más de paso para ir Fernando VII al apartamento de su esposa (lo formaban 3 estancias, que Alfonso XII destruyó para hacer el Comedor de Gala, consevando sólo los frescos de los techos de cada sala).
Los dormitorios de los reyes en el siglo XIX eran ya privados, no públicos como con Carlos III.
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Aquí añadiría a la Casa de campo que aunque esté cedida en usufructo al ayuntamiento de Madrid la titularidad es de PN, según Juan Vázquez de Molina secretario de Felipe II sin la compra de las tierras de los Vargas para dotar de tierras al antiguo alcázar no se hubiera traído la corte a Madrid, algo que no se podía dar por hecho ya que el país estaba en bancarrota, así que en parte ambos están relacionados
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Efectivamente, se conserva la cama, las tapicerías (que son unas ahora cosidas encima de las colgaduras de seda de la saleta amarilla de manera horripilante) y las pinturas. Pero no creo que haya que quitar la decoración del salón de época fernandina tampoco. Estoy en contra de la idea de modificar con cosas históricas que al final son también historia del palacio para poner una reconstrucción.
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