Joer, me duele el dedo de dar tantos “me gusta”; me encanta.
Un pequeño inciso. Villanueva, lo primero que hizo Carlos III fue mandarle a Roma para que se empapara de neoclasicismo; no es que estuviera en contra del barroco, es que consideraba el barroco un sin sentido de sobrecargamiento; el neoclasicismo se veía como más limpio, más proporcionado, más racional; de hecho, aunque parezca mentira, Le Corbusier siempre dijo que admiraba las formas tan lógicas del clasicismo arquitectónico.
Y el rey que empezó a embellecer las entradas a Madrid, el que higienizò Madrid por la parte de lo que hoy es Chueca, (calles perfectamente alineadas) y el que urbanizò el Prado fué Fernando VI; Carlos III sólo y que no es poco, siguió dando continuidad. Carlos III venía con las ideas de la Ilustración, de ahí su admiración por el “neoclasicismo”.
Es sólo una aportación humilde. Miéntras a seguir aprendiendo.
Y un montón de planos, cuadros, esculturas… y un arca muestrario de mármoles. Los arquitectos buscaron por toda España los mejores mármoles para adornarlo. Se conservan ocho arcas muestrario que ordenó realizar Sabatini a finales del XVIII, en donde se pueden ver más de 300 ejemplares.
La verdad es que las jambas y dinteles de todas las puertas y ventanas de la planta noble del palacio, son un muestrario completísimo de los mejores mármoles de toda España.
Quizás por eso tras la masacre cultural que hizo Alfonso XII eliminando toda la decoración de los salones oficiales salvo la de los techos (todas las sedas del siglo XIX y XIX, algunas chimeneas, algunos estucos, los mobiliarios…), al diseñar las nuevas decoraciones, las cortinas serían más pequeñas para que no taparan los mármoles que bordean puertas y ventanas. (Las cortinas previas, más altas y anchas, se colgaban de los muros sobre los dinteles por lo que al cerrarlas, no se veían los mármoles).
Pongo el enlace a un muy buen trabajo de María Luisa Tárraga Baldó sobre el uso de mármoles en la decoración del Palacio Real de Madrid. Es muy interesante.
Con respecto a los relieves para la galería del Palacio Real, estos estarían divididos en cuatro temas, un tema para cada pared, los cuales serían:
Órganos supremos del gobierno de la nación (de los cuales se conservan 6 de los 11 proyectados originalmente)
El Consejo de Guerra
El Consejo de las Órdenes Militares
Consejo de Hacienda
El Consejo de la Inquisición
El Consejo de Castilla
El Consejo de Indias
Batallas (9/11)
La batalla de las Navas
La toma del Reino de Granada
La rendición de Sevilla
El Sitio de Sagunto
El sitio de Numancia
Toma de Toledo
Batalla de Clavijo
La conquista de Méjico
La Batalla de Covadonga
De temática religiosa (9/13)
Imposición de la casulla a San Ildefonso
San Dámaso y San Jerónimo
El Concilio III de Toledo
Primer concilio de España
Martirio de San Lorenzo
San Ildefonso y Santa Leocadia
El martirio de Santa Eulalia
San Isidro Labrador
Martirio de San Vicente
Ciencias (7/11)
La Gramática
Alegoría de la Música
La Teología
La Filosofía
Las Ciencias Matemáticas
Apolo y las Musas (La Poesía)
La Metafísica y la Dialéctica
Estaría genial que se colocaran en la galería para realzar su monumentalidad y para que al menos estén expuestos, ya que en el Prado solo están expuestos un par y eso que son de algunos de los escultores españoles más importantes de la época, como Luis Salvador Carmona.
No lo veo. Por un lado, la serie no está completa, lo cual dejaría muchas sobrepuertas sin cubrir. Por otro lado, los mejores medallones se pueden ver hoy en día en el Prado (hay expuestos 7, no 2) y en la RABASF (6 expuestos, 2 en el museo y 4 en la sala de juntas), mientras que si se colocasen a 5 metros de altura no se podrían disfrutar. Además, varios de ellos están inacabados o muy destrozados. Y por último, los medallones jamás se colocaron en el sitio para el que fueron diseñados, no tiene demasiado sentido colocarlos ahora.
Creo que precisamente tiene sentido colocarlos ya que es el sitio para el que fueron diseñados, al margen de que llegaran a colocarse alguna vez o no. Colocarlos nos da la oportunidad de contemplar una obra de arte para el contexto que fue creada. Y respecto a lo de que quedarían sobrepuertas sin cubrir es cierto, pero imagino que ya en el siglo XVIII no contaban con cubrir todas las sobrepuertas (redujeron el número de relieves de 46 a 39 y en el lado de la capilla iba haber dos más que en los otros tres). Aun así creo que esto tampoco sería problema, los relieves podrían ponerse en los huecos del medio de cada lado de la galería, de manera que solo los extremos del lado quedaran vacíos.
Si los colocasen, además de que se ubicaría esas obras de arte en el lugar y para el destino que fueron esculpidas, eso supondría también la oportunidad para otros escultores actuales de colocar ahí sus propias obras, en los huecos vacíos.
No todos los días surge una oportunidad así.
Desde que se esculpieron los relieves, han pasado muchas cosas buenas en España que merecerían ser esculpidas en mármol.
Se me ocurre que si se llegara a hacer se podría utilizar el pedestal del bronce del proyecto de Lorenzo Vaccaro para un monumento a Felipe V en Nápoles del museo del Prado, el cual es maravilloso.
Volviendo sobre los emperadores, yo creo que, como se adivina en algún grabado, los pedestales originales llegaban hasta la altura de los alféizares de las ventanas de planta baja, más parecido a como vemos hoy día a los reyes de Plaza de Oriente, y que, al ponerlos en el patio, se pusieron en un pedestal más bajo que las alinease con las basas de las pilastras del mismo.
Porque parece que algunos están en las plantas altas, otros en el ala de San Gil (por cierto, en lo que dicen que eran dormitorios reales ¿no decíais que estaban intactos?) aquellos en pisos altos cerca de la capilla, y otros más en la biblioteca. ¿Se comunican todos esos espacios entre sí?
Los coches aparcados por los trabajadores son muchos. Más los que acudan a trabajar caminando, en bici o transporte público.
Al final va a ser que Palacio es, en esencia, la sede de Patrimonio Nacional.
Los dormitorios del Ala de San Gil están en la planta noble, y se conservan intactos. Pero encima hay varias plantas más, donde supongo que habrá oficinas.