Debe de haber un urbanismo diferente para cada tipo de persona. Hay gente a la que le gusta el bullicio de la gran ciudad, gente que quiere vivir en un bosque… y se deben hacer viviendas para todos ellos.
Que cada uno elija en libertad. Nadie debe obligar a los demás a vivir de una determinada manera. Eso es de mentalidades dictatoriales. Hay que respetar la diversidad.
Las dictaduras siempre se basan en un presunto bien común: religioso, político, ecológico, de genero… “Yo estoy en posesión de la verdad, lo hago por tu bien y debes de hacer lo que yo digo”
Torquemada, Franco, Irene Montero… todos se creían en posesión de la verdad y se comportaban como dictadores “por el bien de todos”.
¡Que cada una viva a su manera sin imposiciones de gente que cree saber lo que deben de hacer los demás!