Lo siento, pero voy a seguir con la arquitectura moderna, y con uno de los grandes; hablo de Alejandro de la Sota, el autor de la “Fábrica Clesa”, y que un forero sin querer, me dio la idea de aportar algo sobre este arquitecto; ya aporté sobre el Gimnasio Maravillas, la que está considerada una de las obras emblemáticas no solo de la arquitectura moderna madrileña, sino también española;
Siempre fue a lo suyo, en su búsqueda incansable e investigadora de los nuevos materiales, y una forma de desarrollar los programas que se le encargaban de lo más original; pero nunca fue de estrella, de ahí que no se le pusiera en los grupos de Saenz de Oiza, Fisac, Gutierrez Soto, Corrales y Molezún, De la Hoz Arderius, pero la historia le ha puesto en su sitio, como uno de los grandes; esperemos que se pongan en valor su forma de entender la arquitectura, y que no le sigan tirando casas, yo por lo menos pondré mi granito de arena, aunque en un foro de arquitectura “no guste el movimiento moderno”;
Colegio Mayor Cesar Carlos;
Ciudad Universitaria; 1967.
Fuente: Wikimedia.
He tenido que coger una foto prestada para que se vea un poco como es este CM, porque está súper cerrado y arbolado, por lo que no es fácil hacerle fotos;
Un ejemplo donde se ve la originalidad que tenía De la Sota a la hora de desarrollar programas;
La composición es la siguiente: dos bloques comunicados mediante un pasadizo semienterrado donde se coloca la biblioteca, y en su extremos dos torres simétricas que agrupan los dormitorios en torno a un núcleo de comunicaciones verticales, siendo coronados ambos volúmenes por el cuerpo del gimnasio, una estructura ligera y acristalada, que los enlaza por arriba, creando una imagen de un bello arco del triunfo desornamentado;
En el bloque de enfrente, una solución racionalista para dos plantas y semisótano, donde se colocan el resto de zonas comunes y servicios.
Las dos opuestas volumetrías se unifican en el revestimiento empleado: plaquetas de ocre verdosa e iguales tipos de huecos y carpinterías;
Fuente:COAM;
Si esta forma de entender un programa universitario no merece protección, y tratándose de un edificio de 55 años, pues no sé que lo merece.
Centro de Cálculo de la Caja Postal de Ahorros;
Barrio de la Paz; 1977.
Muy cerquita donde 15 años atrás había construido la fábrica Clesa,
ya se que alguno se preguntará ¿y porque esto?; hombre, siendo una época que según la fundación Alejandro de la Sota su labor investigadora de materiales era mas incansable, y que en España tampoco es que se estuviera muy acostumbrado a hacer “centros de cálculo”.
Proyecto pródigo en sugerencias de un variado programa que se trató de concentrar en una forma única; las exigencias a cumplir venían dadas por su forma de uso, por la seguridad, por esas interrelaciones, por su situación y como se construiría; al final se decidió que era más importante la seguridad que su relación con la situación donde se haría.
Dos pabellones cúbicos enlazados por un ligero corredor acristalado, en una estructura de retícula de 7x7 m, pórticos metálicos de pilares de C y vigas Boyd, y un módulo de cerramiento de Aceroid.
El resultado para los que vemos en la arquitectura “una forma más de expresión artística”, es dos cubos de hermetismo, que producen una imagen irreal y esquemática, enseñando en su ausencia de expresividad su contenido real;
(Docomomo).
Fin.