Viendo la evolución “térmica” de muchos barrios nuevos uno se preocupa que vayan (estos y los millones de metros cuadrados que están por venir) a intensificar notablemente la isla de calor madrileña.
¿Sería posible añadir una cláusula, una herramienta o filtro de control que asegure que los barrios nuevos aprobados en X años no calentarán la ciudad? Jugando con disposiciones, ordenaciones, orientaciones, materiales, acabados, vegetación…
También es un fallo habitual en muchos barrios periféricos de unifamiliares, que más que ciudades jardín son adosados más o menos hacinados, sin zona ajardinada útil ni arbolado en la calle: una enorme superficie de pavimento, cubiertas y asfalto, sin sombra alguna, el horno perfecto.
Si no fuera posible ese filtro, o demasiado engorroso, ¿sería posible una medida un poco tonta, tipo “deberá haber un árbol plantado por cada vivienda en plurifamiliares y uno por habitación en unifamiliares, en suelo y dentro de la parcela”?
El objetivo sería evitar barrios así. Calle sin arbolado y viviendas unifamiliares con espacio libre demasiado pequeño y condicionado para plantar un solo árbol (además, los particulares en España no solemos plantar arbolado de gran porte: un ciprés, un olivo… como mucho).
Lo triste es que aun así, entiendo que por los materiales que tan bien atrapan el calor y el abundante pavimento, basta ver el mapa de calor y comparar lo no construido del Sureste con lo construido…
Jajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja
Lo presentan como un experimento para estudiar a extraterrestres, o incluso peor: como algo peligroso; donde hay que destapar algo de una sociedad, organización secreta, grupo mafioso, terrorista…en fin. Me quedaré con que suena a titular extraterrestre “La que se infiltró en una familia amish”
La antropóloga que se infiltró en el PAU: “En estos barrios encuentras una continuidad de lo patriarcal”
Un experimento para la confirmación de sus prejuicios, de la “infiltrada” y la periodista. Para vosotros, nuestros lectores.
Es curioso que lo plantee como si la facilidad que ofrece ese modelo para conciliar fuese algo negativo, y que la opción más favorable fuera la de realizar actividades lejos del domicilio para que no se complementasen con las del cuidado.
Las actividades que ofrece ese modelo son generalmente las que eligen las mujeres. Pero claro, según ese sesgo de confirmación “las mujeres eligen mal”…por el “patriarcado”, por supuesto. (conciliación bien o mal en función del sesgo)
De no ser por el yugo de ese “patriarcado”, lo más seguro es que las mujeres eligiesen clases de Karate a 15 kms de su domicilio… ¡tócate los h****s!.. Menuda tesis le ha salido a la “crema” de la intelectualidad.
No le falta razón, son barrios hechos para perpetuar un modelo familiar y social autista y de tinte privatizador neoliberal. Es un modelo urbanístico perverso que solo se puede defender desde una óptica de la anti ciudad y anti sociedad.
Y les honra publicarlo a riesgo de ponerse en contra a todo el lobby político-constructor de Madrid.
Yo no defiendo ese modelo de ciudad. Pero tampoco suscribo la tesis de la investigadora (mucho menos cuando pone en cuestión la conciliación y la comodidad, independientemente del género).
El problema de los PAU está lejos de ser nada relacionado con el patriarcado.
A nivel sociológico la tesis sí podría girar entorno al individualismo (y ahí se podría analizar cómo el modelo liberal ha configurado esa malla urbana). Pero de ahí a poner en entredicho las decisiones de las mujeres, vayan en la línea que vayan, me parece hasta machista.
Pues a mí me parece evidente que es un modelo que perpetúa el modelo tradicional y patriarcal de familia. El padre a trabajar, la mujer a llevar a los niños y luego entretenida en clases de yoga mientras el niño va a la academia de inglés en el local de al lado o en la misma urbanización.
Una cárcel de pladur como bien se dice en la famosa serie que tan bien caricaturiza a los habitantes del pau.
¿Quién ha dicho que la mujer no trabaje? ¿y por qué tendría que trabajar la mujer si no le apetece? ¿por qué las elecciones de ocio de las mujeres tienen que ir en línea con argumentos ideológicos? ¿por qué es malo un modelo tradicional si es elegido?.
Suenas bien machista. Como todo feminista posmo.
A la mujer que no le interese ese modelo, que no lo elija.
Precisamente promueve que la mujer trabaje y además cargue con la crianza en los espacios perfectamente diseñados para ello, dentro de la urbanización o en el local de al lado, que no es para comercio tradicional sino para que la mujer pueda hacer yoga mientras sus hijos aprenden inglés. Y si tiene un rato libre al supermercado en SUV para hacer la compra.
Mientras tanto el marido jugando al padel con los amigotes despreocupado de todo. Eso es lo que se promueve en los paus y estás ciego si no lo quieres ver.
Y eso respecto a la mujer, pero también daría capítulo aparte para el sesgo de clases que desprenden estos barrios. Ver los autobuses o el Cercanías lleno de asistentes del hogar debería darnos una idea de cómo se están configurando socialmente estos engendros urbanos totalmente perniciosos para la sociedad.
Estamos creando una sociedad clasista y segregada que se cree rica por tener una piscina debajo de casa, dos coches e ir a clase de pilates mientras los retoños se sacan el B1 de Trinity College. Es ridículo y triste a partes iguales.
Tú lo ves como que está diseñado para que trabaje más, pero paradógicamente, la propia invesitgadora asevera que el modelo facilita la conciliación.
Curioso que lo que propone como óptimo sea que el ocio femenino deba estar más lejos… una ocurrencia para que encaje en su narrativa. Porque si de hecho ese fuese el caso, lo más probable es que hallase otra explicación para hacer ver que “el patriarcado” expulsa de las comodidades de la cercanía urbana a las mujeres… todo sesgo de confirmación.
Que las mujeres tengan doble carga de trabajo (la doméstica y la laboral), es mucho más relativo e individualizado de lo que planteas. (entre otras cosas, porque en el ámbito doméstico lo que predomina es una visión femenina de cómo debe abordarse, y eso genera otro sesgo).
A todo esto, lo pernicioso de ese modelo (lejos de análisis pueriles sobre el patriarcado y otras fantasías posmo intelectualizadas y hechas dogma) es que es el prácticamente el único que se proyecta. Y lo que no puede ser, es que Madrid crezca a golpe de PAU de baja densidad.
Como un modelo residencial puntual de la periferia, no sería tan cuestionable. El problema es que han colmatado la bolsa de suelo libre del municipio a base de ese modelo.
Yo no hablaría con tanta ligereza sobre los resultados de una tesis habiéndome leído una simple entrevista en un diaro generalista. Lo que esta claro es que, unos desarrollos planificados hace 40 años, probablemente por hombres de una considerable edad, no tiene pinta de que tuvieran demasiado en cuenta la perspectiva de género.
Yo comento en base a lo que la investigadora alega en su entrevista, que es un resumen de su investigación.
Sobre la perspectiva de género aplicada al urbanismo, incurre en el sesgo de colectivizar a la mujer como si las necesidades de una fuesen a ser las mismas que las de otra (al igual que con los hombres).
Insisto, a las mujeres a las que no les gusten las avenidas anchas ni las familias o clases de yoga, pueden optar por callejones estrechos y volver solas y borrachas a casa en Lavapiés.
Entiendo que estos temas os son de mucha sensibilidad para algunos. Espero que en algún momento podamos discutir sobre ellos sin tener que leer chorradas entre medias, porque me parecen muy interesantes.
