Aquello de las naves y su impacto, siempre me sorprendió para mal Aranjuez.
En el paseo a lo largo del río, en el jardín de la isla, lo que ves son naves medio abandonadas, con ladrillos de hormigón visto.
Estás en uno de los jardines más famosos de España , puede que sea EL jardín, y a 40 metros en frente tienes la parte trasera de concesionarios, mecánicos y gasolineras.
Evidentemente, no hice foto, pero ves la parte trasera de esto:
Y sin salir de Aranjuez, jamás entendí la convivencia de una de las vistas más potentes del palacio con el cutre restaurante a su lado.
Yo iba a hablar de lo mío. Pradollano, Marinador de las montañas. Macro urbanización de pisos a 2.100 metros de altura, en pleno Parque Natural de Sierra Nevada.
Supongo que, en una economía relativamente poco productiva, muy frágil ante los ciclos económicos, el suelo y el ladrillo suponen un recurso fácil.
Más aún cuando producir suelo urbanizable es tan sencillo como dibujar una rayita en el plano que ilustra el Plan que se publicará en el Boletín correspondiente. No digamos aportarle rentabilidad en forma de edificabilidad.
Si en esos pueblos, villas y ciudades hubiera un sector agroalimentario potente y con buen valor añadido o se fabricaran, qué se yo, helicópteros, nanochips o frigoríficos industriales, quizá la pasión por invertir en suelo y ladrillo fuera menos. O, al menos, mas exigente.
Quizá sea hora de incluir en la legislación la evaluación de impactos visuales y paisajísticos, salvaguardando las más valiosas o características y dotando a las administraciones de instrumentos y financiación para la recuperación de aquellas que aun sean salvables.
Y es que, es cierto, entrar en cualquier villa p pueblo grande de España es llorar. Es cierto que pasa también en Italia y, a veces, en Suiza o incluso en Francia (Dax es un ejemplo) pero en España con nuestros polígonos residenciales e industriales, somos campeones de lo cutre.
Pero lo extraño es que muchas zonas de agricultura bastante intensiva y productiva no se caracterizan precisamente por ese cuidado ambiental o paisajístico.
Pienso en las vegas del sur y el levante, o la depresión del Ebro.
Una larga tradición turística puede tener un peso algo mayor (Gerona, Baleares).
O un ambiente académico y cultural que hubiera puesto en valor ese paisaje y patrimonio: en Madrid (de los Austrias), Salamanca, Granada, Sevilla, Oviedo o Barcelona no sucedió como en Málaga, Gijón, Valladolid, Alicante o Vigo.
También formas de crecimiento algo más progresivos, y no tan bombástico (imagino que relacionado con lo que dices de la economía poco productiva). Al final los pueblos españoles están formados por un núcleo de cientos o miles de años, al que superponemos una brutal expansión desarrollista de 20 años y luego otra brutal expansión de la burbuja de 10 años. De haberse producido un crecimiento más dilatado…
La tradición urbanística e inmobiliaria franquista, de la que el R79 ha sido bastante continuista, no ayudó. Parece que antes de la Guerra Civil España era un país referente en urbanismo, qué menos, su inventor.
Yo también me alegro de que esté tan vivo Albarracín, y espero que siga mejorando un poquito, porque una de las cosas que más recuerdo de cuando lo visité es la singular experiencia de entrar a los aseos del bar donde comimos y encontrarme con una pintoresca placa turca.
Me ha entrado curiosidad. Yo solo he estado una vez en Abarracín, hace bastantes años y me encantó.
Su renta per capita era de 21.500 € en 2019. En 2016 era de 19.600. Por comparar, Parla en 2019 tenía 23.200 €, Móstoles tenía 25.000 €, Cinicientos no llegaba a 19.000 €. Yo no diría que Albarracín es rico, pero pobre, tampoco.
¡Que espanto! La mayoria de edifcios con fachadas reformadas me suelen parecer bastante
más feos que como eran originalmente. Cuando se reforman o acaban con fachadas grises estilo soviético o en un batiburrillo hortera de colores. No se como la gente puede tener tan mal gusto estético
Algunos pueblos de la lista en cuanto arquitectura son un poco decepcionantes. Los del pirineo mismo. No es que sean feos pero la mayoria estan muy muy reformados y mas que un centro histórico auténtico son un conjunto de chalets al estilo rústico. En cambio otros son una pasada.
El Supremo encara fallos clave para las polémicas urbanísticas
La prórroga de la fábrica de ENCE o la reactivación de la ZAL del Puerto de Valencia, pendiente de resolución.
Las polémicas construcciones en parajes naturales o espacios protegidos durante la era dorada del ladrillo aún siguen coleando en los tribunales, en los que llevan años afincados. Muchas de estas han llegado ya hasta el Tribunal Supremo, que en 2023 tiene el reto de poner punto y final a gran parte de estas discusiones, mientras que en otras tan solo aclarará puntos concretos sobre la legalidad de las edificaciones, dando así paso a nuevos capítulos en las largas batallas judiciales.
Eso es lo que ha pasado recientemente con El Algarrobico. Los días del hotel Azata del Sol, situado en Carboneras (Almería), parecen estar contados, sobre todo después de que el Alto Tribunal ya declarase, hace tiempo, que estaba levantado en suelo no urbanizable y violaba la Ley de Costas. No obstante, distintos trámites administrativos y judiciales han ido retrasando su demolición.