Ya se ha puesto antes por aquí, pero autoflagelémonos un poco más…
Dios del amor hermoso (y nunca mejor dicho) que impresión da verlo. Eso sería una catedral singular, que destaca pero a la vez que completa el Real. Es increíble la falta de ambición del obispado.
Eso hubiera sido lo ideal, sí. Pero lo que yo hablaba era de hacer un proyecto que generase una catedral nueva sin eliminar la estructura de la catedral que ya tenemos.
Eso dejaría Star Wars a la altura de Emilia Pardo Bazán.
Yo me «conformo» con que edifiquen el esquinazo de Bailén para darle cierta coherencia a la calle, que pongan los balaustres de cornisa y que tallen todos los capitelines del interior.
Y ya habría que ponerle un cirio a la Virgen.
Ya sabéis que tengo una lista mucho más larga de requerimientos, pero eso sería pedirle peras al olmo.
Venga que es sábado noche:
Adelantar el pórtico principal para crear una segunda columnata más refinada con una cornisa y balaustres más atinados, ocultando la fachada de Chueca y ocultando la espadaña que quedaría en la posición actual.
Eliminando el descansillo de la escalinata o prolongándola.
Mediocridad, oleo sobre lienzo:
Si te vas a limitar en altura tendrás que ganar en volumen, anchura o innovaciones técnicas.
Con cinco naves:
Flexeando de pacatos.
Me encanta que hable de horizontalidad y no se le hubiera ocurrido una catedral rectangular al estilo de Catedral-basílica del Pilar.
Eso es exactamente lo que habría añadido si no diera fallos continuamente el foro y tenga que desistir de escribir un montón de respuestas/ediciones.
Lo intenté añadir en varias ocasiones.
Con cinco naves y elevando las naves laterales absorbiendo el triforio:
El ridículo de Chueca Goitia se cuenta solo.
Si quieres mantener el esquema gótico qué menos que extenderla hasta las cinco naves.
Yo es que todo lo que no hubiera sido una configuración así lo veo un fracaso.
La paradoja de herir de muerte la cornisa madrileña pretendiendo salvarla.
La frase es demasiado dura, pero me ha venido a la cabeza:
«Prefiero los malos a los tontos porque los tontos son impredecibles».
Está es más justa:
«El infierno está pavimentado de buenas intenciones».
Y si pretendes respetar escrupulosamente lo heredado, puedes crear unos vitrales enormes como en León (siendo la Almudena más extensa) y ocultarlos del exterior con falsas fachadas voladas perfectamente clásicas de granito y piedra de Colmenar, de forma similar a San Pablo de Londres o al Panteón de París.
Un combo perfecto de mediocridad, humildad mal entendida y cortedad de miras.
No tienes que hacer una catedral aparente, sino la mejor catedral posible con las premisas dadas.
No puedes decir literalmente «es bellísima» sino tienes el gusto completamente atrofiado por la posguerra.
A Ventura Rodríguez se le caería la cara de vergüenza.
¿Solo a Ventura?