El otro día, sin tiempo para escribir, traje esta foto a cuento de que creo que muestra a la perfección el aislamiento del arco y la dificultad para integrarlo en su entorno.
Creo que, primero, habría que reducir tráficos en la plaza. Segundo reordenarlos, suprimiendo los pasos subterráneos y, muy en especial, el de salida de Madrid desde Princesa (a la izquierda en la foto). Tercero, facilitar el acceso a la superficie pavimentada bajo el Arco. Para ello, cuarto, sería necesario dotar de algún atractivo al Arco, bien en su interior o en exterior, comenzando por la dignificación de la propia obra. Quinto, ese Arco, bien es verdad que de forma algo forzada, supone el ingreso en la Universitaria; por tanto, habría que mejorar su relación con el campus, mejorando esas aceras, ¿cruzando en RRCC, bajo el puente del tranvía? y abriendo el antiguo rectorado, la profesorera, las facultades cercanas, que ahora son islas cercadas y separadas unas de otras, cuando deberían ser espacio único, Sexto, mejorando la relación con el Ministerio del Aire y con el parque del Oeste (compruebo con escándalo que la rampa del intercambiador ha limado la plaza, eso debería corregirse) recuperar las aceras del Parque del Oeste frente al Arco, para llegar hasta el antiguo CM José Antonio (hoy, Rectorado) Séneca y demás.
En suma, devolver o dar un aire urbano a un espacio que, quizá por cierta gradilocuencia original en su concepción y por ser, también en origen, concebido como acceso a Madrid por autopista (es quizá el gran error del Campus de Moncloa, que nadie, ni República, ni Franquismo, resolvieron, al contrario) jamás disfrutó.