Es que insistimos en el Gobierno nacional, que sí, que tiene Cercanías hecho un desastre… O la vergüenza de la vivienda pública… Pero Prado, Sorolla, Barajas, Chamartín, Atocha… Están en obras. Y con muy buenos proyectos.
E independientemente con PP o con PSOE. Ninguna ciudad española tiene ese calibre de proyectos estatales en marcha. Hasta proyectos de menor calibre… Se cuida algo más.
Lo más interesante inaugurado en la ciudad este último año, Galería de las Colecciones o Casa de la Arquitectura (que ya se quiere ampliar)… estatal otra vez.
Ahora a nivel municipal y regional… ¿los grandes proyectos?
Cercanías a Navalcarnero abandonado
Cercanías a la Warner desmantelada, aunque haya inversiones privadas de cientos de millones en juego
Sureste sin Metro
Bosque Metropolitano sin noticias desde hace un año
Coitus interruptus de Madrid Rio
Legazpi, desechando el proyecto previo
Ciudad de la Justicia, desechando el proyecto previo
CCIM descartado, desechando el proyecto previo
Plan de Mercados abandonado
Prado Recoletos que nadie se atreve a hacer
La Elipa sin obras, que podría retrasar la materialización de MNN
…
Ya ahora oímos que La Paz se quiere descartar por una lucha de egos…
Desde hace 10 años son incapaces de sacar un solo proyecto gordo adelante.
Otras cosas (promoción, agenda cultural, atención en hospitales, las promociones de la EMVS…) puede estar muy bien en Madrid.
Proyectos y planes… Suspenso bajo… No por el Estado precisamente… La pelota no está ni ha estado en la Moncloa (con Sánchez, con Rajoy…), me mantengo en esa.
Yo creo que en Madrid no se hace tan mal. Yo viví en Birmingham y alli, como en el resto de ciudades del UK, recogían la basura una vez a la.semana. En los edificios había una especie de cochera para dejarla. AL cabo de 4 dias no había quién entrara a ese cuarto, del pestazo que había. Y allí tenían que entrar a recoger la basura los del camión. Esto fue en 2016 y 2017. No se reciclaba ni por cojones.
Asi que, creo que Madrid ni tan mal.
De hecho en Taiwán era peor. El camión de la basura pasaba dos veces a la semana a una hora concreta, pero no está permitido dejar la bolsa de basura en ningún contenedor fuera de tu casa. Así que el olor te lo quedas dentro.
Vaya, pero sí los políticos habían creado, en teoría, decenas de hubs y clústeres
Las grandes ciudades españolas chocan con la innovación: “Ni Madrid ni Barcelona saben dónde tienen que ir”
Las principales áreas urbanas de España no han sabido unir todavía a empresas con universidad para crear un ecosistema capaz de competir en el mundo
“Ni Madrid ni Barcelona ni Bilbao tienen un horizonte claro de hacia dónde tienen que ir en los próximos veinte años”, denuncia sin dudarlo Ramon Gras, investigador de la Universidad de Harvard. Basa su afirmación en la quincena de bases de datos estadísticos que ha utilizado para escribir junto a su socio Jeremy Burke una suerte de manual de urbanismo basado en la ciencia de datos titulado City Science. Performance follows form (Ciencia de la Ciudad. El rendimiento sigue a la forma), publicado por su empresa Aretian y cuyas conclusiones se basan en los resultados obtenidos de un centenar de ciudades. Entre ellas se hallan las tres áreas metropolitanas españolas con una economía más desarrollada y que se sitúan entre las cinco con mayor renta per cápita del país, pero que a nivel global no quedan muy bien paradas: no sobresalen en casi ninguna actividad económica pese a tener fundamentos para hacerlo, importan más de lo que exportan y si bien atraen talento extranjero, este no es de primer orden, probablemente porque tampoco son capaces de generar proyectos con suficiente capacidad de atracción o el salario que sí pagan en otras partes.
“Los mejores de las finanzas no quieren ir a Madrid, sino a Londres o Nueva York, y quienes quieren hacer una industria fuerte piensan en Múnich o Stuttgart, no en Barcelona”, dice Gras. La clave para darle una vuelta, como ha ocurrido en otras ciudades de diferentes tamaños de Estados Unidos, es la capacidad de crear ecosistemas en los que no solo convivan industria y universidades, sino en los que se produzca un intercambio bidireccional de conocimiento y tecnología para alimentar el ciclo virtuoso.
La tónica general en España, sin embargo, es toda la contraria: compartimentación. El caso de Madrid es paradigmático, según Gras, ”con una zonificación muy fuerte”: la industria se ubica en el cinturón sur, la universidad en el noroeste, los servicios y las grandes corporaciones en el eje de los barrios del centro, Salamanca y el paseo de la Castellana y los campus tecnológicos de Telefónica, Ferrovial y Acciona —”un poco anticuados, creados en los años 2000 pero con modelo de los años setenta”, los califica— están alejados tanto de la universidad como de las empresas. No se acaba de aprovechar su poder financiero, ni el hecho de que tenga las mayores constructoras europeas o el sector de las telecomunicaciones que representa Telefónica.
“Lo óptimo sería que hubiera cuatro o cinco zonas en los que confluyeran universidades, entes de transferencia de innovación, incubadoras de startups, grandes compañías tecnológicas de valor añadido e industria, pero la realidad es que Madrid no tiene ni un sistema de innovación avanzado”, critica Gras. “El clúster universidad-empresa en Madrid no existe”, admite José María Ezquiaga, exdecano del Colegio de Arquitectos de Madrid, quien lo achaca a la endogamia de las universidades españolas y sus limitados presupuestos, incomparables a los de los centros más prestigiosos de Estados Unidos. Asimismo, explica que la evolución de las grandes ciudades corporativas no tienen un componente tecnológico porque fueron fruto de “operaciones inmobiliarias de valorización de activos en el centro de la ciudad”: sacar plusvalías del centro y racionalizar gasto en el extrarradio. Pero pese a todo, Ezquiaga subraya que Madrid está en la lista de las grandes ciudades globales, con gran peso del sector financiero y capaz de atraer a multinacionales extranjeras e inversiones inmobiliarias.
A grandes rasgos, Barcelona está atacada por el mismo problema y sufre sus consecuencias. Uno de sus grandes pros es su diversificación y uno de sus grandes contras es la ausencia de picos de excelencia. El riesgo de deslocalización sigue siendo alto para actividades anticuadas y el 20% de la industria manufacturera situada en la zona de influencia de Barcelona está en riesgo de desaparecer. En Madrid ese porcentaje alcanza el 30% y en Bilbao, el 15%, según los datos de Aretian. Y pese a haberse convertido Barcelona en un vivero de startups, apenas el 20% de estas son intensivas en conocimiento. Gras considera que en un ecosistema normal de innovación ese porcentaje se eleva hasta el 70%.
Intensidad de innovación en Barcelona y Madrid, medido por número de profesionales en actividades intensivas en conocimiento. El color rojo intenso es el nivel más bajo, el azul más intenso, el más alto.
Lo cierto es que cuando las comparaciones son económicas (no de calidad de vida o como destino turístico) las comparaciones en esos índices son demoledoras para todas las urbes españolas, Madrid incluida…
A veces en tema hotelero o inmobiliario.
Ojalá verlo pronto en universidades, investigación, salarios…
Pero es que España tiene una economía muy precaria, a pesar de que en los medios se nos dice casi siempre lo contrario. No sé qué podrían hacer las ciudades por si solas (diría que nada que fuera realmente decisivo)
Nuestra posición respecto a Europa es mucho peor que la que había en 2008, es una pena pero una ciudad por si sola no va a poder despuntar por mucho que lo intente si las leyes y políticas nacionales no acompañan.
Por sí solas poco… Lo que tal vez algunos siempre insistimos: un planeamiento actualizado, coordinado, moderno, que de respuesta a algunas necesidades de mercado y de la población, agilidad administrativa…
Aunque sin duda la mayor responsabilidad no está en los Ayuntamientos.
De hecho, dándole una vuelta, deberíamos centrar nuestras prioridades en esto.
Parece que nos centramos en clave nacional, demasiado, “Madrid se lleva el 70% de la inversión nacional”, “Madrid se lleva la F1 de Barcelona”, la competición fiscal entre autonomías… Normal que se afiancen resentimientos (también alimentados desde otras direcciones, que todos lo sabemos).
Debemos priorizar objetivos menos halagadores, pero que no sitúan a Madrid como una “acaparadora” (no lo es, pero esa sensación existe) sino como “nuestra baza para competir en un mundo globalizado”.
Yo tengo la sensación de que los españoles en general no solemos mirar lo que pasa más allá de nuestras fronteras. Políticos incluidos.
Creo que en otros países están más agobiados por “quedarse atrás” frente a otros. Incluso a nivel ciudad. A mi me sorprende lo discretamente que hemos pasado a quedarnos relegados económicamente frente a antiguos países socialistas, o lo inadvertidas que pasan esas noticias que cuestionan el abrumador éxito económico madrileño.
Eso ejerce cierta presión a los gobiernos y extendería el apoyo de la gente a Madrid… Si Madrid va bien, España va bien…
Madrid, entre las 10 ciudades del mundo que más beneficios económicos genera con el turismo
Madrid se encuentra entre las diez ciudades del mundo que más beneficios económicos genera con el turismo al mismo tiempo que mejora sus resultados ambientales y sociales, según los resultados del Informe ‘Destination Always’ elaborado por la plataforma digital de viajes Booking y presentado en la feria internacional de turismo Fitur 2024.
Acompañan a Madrid en este listado, París, Chicago, Lisboa, Londres, Berlín, Tel Aviv, Melbourne, Bogotá, México, Chicago .
Los turistas anglosajones no ingleses suelen ser los mas culturales en mi experiencia, Cuando trabajaba en un hostal en el camino de Santiago vi casi tantos americanos como Ingleses o Alemanes, pero veras pocos Australianos o Americanos haciendo la gamba en la Costa del Sol.
Ademas eso se refleja en el dinero que dejan en el pais.
Yo por mi parte del mundo te puedo asegurar que es algo que cada vez se conoce mas, es algo que me han comentado gente que ha ido de vacaciones o incluso algunos con segunda residencia, que tuvieron un cierto “Síndrome de París”
Pero con Barcelona, ya que les sorprendió para mal.
Tanto en Polonia como en Rusia me han salido vídeos recomendados en TikTok hablando de todo el tema de okupas en Barcelona y no es que tuvieran pocas visitas.
Video de hace 6 meses con el chico de Desokupa, casi 600k visitas:
Similar pero de un canal para invertir/vivir en España hablando de ese riesgo:
Una de las razones del centralismo desorejado francés es que los que parten el bacalao tienen claro que potenciar un hub en todos los sentidos tiene grandes repercusiones en la economía de todo el país.
Aquí creemos que vamos a ser Alemania vendiendo cerveza.
No estoy muy de acuerdo con el artículo de El País.
En el entorno de Tres Cantos o Alcalá de Henares si existen relaciones universidad-empresa en los distintos campus universitarios, compartiendo espacios redes de transporte, etc dentro de un mismo ecosistema.
Pero creo que es porque ya tienen en, sus respectivos países, esos lugares para hacer la gamba, como en la Costa del Sol.
No se cruzan medio mundo para ir a la playa, sino que vienen a conocer el país, su historia, cultura, gastronomía, etc.
Para los europeos del centro y norte, España es la playa que ellos no pueden tener.
Si, lo mismo aplica a los asiáticos en general.
Yo creo que Madrid debería centrarse en ofrecer esa imagen de capital cultural, museística con mirada al pasado imperial de la ciudad donde fue capital del mundo.
Por eso me parece muy buena idea recuperar elementos perdidos, además en cuanto a la marca centrarse en vender eso y no en “café con leche en la plaza mayor”, porque para estar sin mas, los turistas se irán a la costa.
