He ido a visitar la Parroquia de Santa María de Caná, en Pozuelo, creo que de las últimas obras que hizo el genio Fernando Higueras; me ha encantado; me ha parecido como el “canto del cisne” de este hombre; fue encargada por su sobrino, párroco de la congregación, y que debió creer en la “redención” de su tío al hacerle construir una iglesia; fue despedido por no adaptarse a lo presupuestado, pero eso es otra historia.
Espero que no se haga tedioso.
Parroquia de Santa María de Caná;
Pozuelo de Alarcón.
Arquitecto: Fernando Higueras Díaz;
Aparejador: Jesús Higueras Díaz.
Cálculo de estructura: Arturo Revenga;
1997-1998.
Esto hay que leerlo, entendiendo el lado socarrón, irónico y carácter crítico, y sentido del humor; hay momentos que te ries.
“Revista de Arquitectura 1998;
Número 316, pag 46;
Fernando Higueras”.
En esta construcción , mi cliente, joven párroco en Pozuelo me pidió:
“Tío: quiero que me hagas una iglesia que no sea modelna”.
“Quiero que tenga planta de cruz.
Quiero que sea de ladrillo, y ¡ah! quiero que tenga muchos arquitos”.
Como nunca he sido pájaro mudo, carnaza conformista y entregada, accedí a lo que me pedía el párroco por no estar a la moda y le contesté a casi todo con un “Sí,bwana”.
Traté de hacer con sus ideas algo antiguo, intemporal e insustituible, capaz de envejecer con el paso del tiempo dignamente y con el mínimo deterioro.
Por ello , tras muchos trabajos de eliminación, llegué a lo que se está construyendo gracias a la generosa aportación de los feligreses convocados por su párroco, a la empresa constructora Cabbsa y al Ayuntamiento de Pozuelo y su alcalde, nuestro compañero y gran urbanista José Martín Crespo.
El solar situado en el número 8 de la Avenida de Europa, corresponde a la parte nueva del Ensanche, muy bien urbanizada gracias a que el Ayuntamiento no tiene pereza en mejorar continuamente lo hecho.
El programa y forma se realizó de acuerdo con el párroco, y puede comprobarse en los planos de planta, alzado y sección.
Se ha trabajo con la misma simetría intemporal que he usado casi siempre, sin ángulos agudos al interior ni al exterior, como es la moda hasta en solares perfectamente rectangulares. Las fachadas paralelas a las lindes se sustituyen por retranqueos ortogonales en terrazas y aleros, sobre los que se sitúa la iglesia, creando el mismo efecto escalonado que conseguimos en nuestras viviendas unifamiliares de Torrelodones o Somosaguas, entre otras, al verse desde abajo.
Las terrazas en voladizo con aleros protectores es otro de los invariantes que no hemos querido abandonar por las modas pasajeras que los eliminan, haciendo una arquitectura que, aunque se llame así , no es ni “racional” ni “funcional”.
Tampoco hay exceso de luz interior, huyendo de nuevo de las modas y con simples ladrillos de 20 ptas la unidad se ha creado unos simples juegos de luces y sombras mediante retranqueos verticales o curvos, en arcos, formando trompas en el pórtico de entrada, las capillas y el crucero, usando las mismas cimbras para todo.
Estas trompas, casi pechinas, además de tener el espíritu que buscaba el párroco, se llevan haciendo desde hace cientos de años en Oriente, pasando por la arquitectura árabe y románica hasta llegar a nuestros días.
Entrada
Crucero
Crucero Foto 2
De tecnología actual se han construido pilares circulares de hormigón con forjado plano y cerchas metálicas para los vanos de 12 metros con voladizos, donde se apoyan las bóvedas que forman el techo acústico interior.
Las formas conseguidas con el ladrillo salieron de un intento de sistematizar la construcción con piezas prefabricadas de hormigón blanco, ligeras y delgadas, pero resistentes y rígidas `por sus plegados y formas; la obra así hubiera resultado mucho más rápida, pero no era gusto del párroco y además hubiera salido más caro. Contra lo esperado, está siendo una sorpresa la facilidad de rapidez y entusiasmo de las ocho cuadrillas de albañiles que realizan el trabajo con el mejor y más antiguo prefabricado que se conoce: el ladrillo.
Al principio las obras se hacían sobre todo siguiendo los planos, ahora la construcción exige cambios y los planos siguen a la obra, en la que intervengo directamente en numerosas visitas de obra, siempre tratando de simplificar, agilizar, mejorar y abaratar los detalles de albañilería.
Cuando esté concluido, el edificio vestirá sus muros exteriores con un traje de parra virgen , que cambia de color, textura y forma varias veces al año, impide el calentamiento de los muros en los meses cálidos y lo permite en invierno. Esto último es otra invariante que mejora nuestras construcciones.
El programa se metió en dos plantas con generosos aleros de protección en todos sus perímetros exteriores e interiores.
Por exigencias del solar se sitúan los servicios parroquiales bajo la iglesia, éstos incluyen un amplio salón de actos polivalente, en forma de cruz, con iluminación y ventilación natural en las cuatro esquinas exteriores mediante patios cuadrados de 8x8 m con aberturas circulares de 4 m de diámetro. En ellos existen jardines, bancos, fuentes, vegetación y cipreses que suben hasta los claustros superiores que rodean la iglesia.
Hay dos atrios cubiertos a la entrada, uno al sur para invierno y otro al norte para el verano.
En cualquier caso, el resultado final, unido a la opinión de los usuarios, importará más de lo que yo trate de justificar aquí.
Se han previsto lugares protegidos para alojar a los pájaros del pueblo, que sin tener la casa terminada, ya buscan protección en los aleros. ¡Ojalá que la torre se termine y vuelvan las cigüeñas a Pozuelo!.




















