El día que la galería de arte nómada británica Encounter decidió echar raíces y abrir su primera sede estable, escogió Lisboa. La mayoría de los compradores de las obras mozambiqueñas que la galería de Élia Gemuce vendió el año pasado eran alemanes, franceses y españoles. La atracción que ARCOlisboa, sucursal de la feria de arte contemporáneo madrileña Arco, inaugurada este jueves en la Cordoaria Nacional, despierta entre los extranjeros que se han mudado a la capital portuguesa por considerarla el último paraíso urbano europeo resultó evidente en las transacciones realizadas en la edición de 2022.