En 2019 algunos medios publicaron que se retomaría el proyecto de Siza para el paseo del prado. Hay noticias similares en 2020, 2021, 2022…¿tenemos alguna noticia para esta legislatura?
Creo recordar que el proyecto se paralizó por la polémica del “no a la tala” de la baronesa que después se publicó que se debía a otros intereses, el enfrentamiento entre Aguirre-Gallardón, el informe de impacto de la CAM, crisis económica, endeudamiento M30, etc. A día de hoy algunos de estos impedimentos quedan muy lejos. Podría retomarse con las modificaciones pertinentes.
Y cuando se le ve no es para hablar de Madrid. No hay proyecto de ciudad, no hay ambición ni hay ganas. Si tanto nos lee alguien de dentro, que coja el timón y empiece a mover aunque sea un 1% de las propuestas que salen por aquí.
Es un asunto recurrente en el foro desde hace lustros.
Los árboles del Prado -y buena parte de los ejemplares de alineación- tienen alturas poco compatibles con el disfrute del paisaje urbano, sin que sea necesario tal desarrollo para proporcionar buena sombra.
El problema es que, con el desarrollo actual, y sin podas previas de formación, habría que recurrir prácticamente al desmoche. Y no es la práctica más aconsejable.
No sé si existe, pero creo que Madrid requiere una gestión planificada, sistemática, del arbolado. París, por ejemplo, lo tiene, estableciendo alturas máximas en función de entornos, sustituciones de ejemplares -los árboles también mueren- podas a lo largo de la vida del ejemplar, labores de plantación -con alcorques mucho mayores y con mejor tierra que los de Madrid- etc. etc.
No entiendo que problema hay con los árboles del paseo, es precisamente parte de su esencia, lo que le hace destacar junto a muchos edificios maravillosos. En verano aportan sombra y en invierno tras la caída de la hoja permite ver los edificios…
No sé si es un problema de altura, de densidad o de ordenación del Paseo, que esa es otra.
Quizá sea todo a la vez.
Pero en el Prado, como en Recoletos, no tienes sensación de conjunto: tal parece que el Museo y sus jardines van por un sitio, el andén central por otro, que las fuentes grandes van cada una por su lado, inalcanzables en medio del asfalto…
Y en cuanto al andén central del Paseo, no sólo no es fácil, en tiempo de follaje, apreciar los edificios del entorno (cuya contemplación, en general, merece la pena; esto no es, pongamos por caso, Ciudad de México, donde el arbolado aporta coherencia a lo incoherente y calidad paisajística a lo que, con frecuencia, no la tiene) sino que además, los continuos cambios de tratamiento en la ordenación o los solados impiden la continuidad en el paseo.
Hay que unificar espacios, darles continuidad física, y pensar en un plan, a largo plazo, para el arbolado. Por cierto, se han talado y plantado docenas de ejemplares a los largo de la última década. Pero ignoro si son cosas improvisadas o forman parte de ese plan sistemático.
Eso es culpa de la mala urbanización, no de los árboles.
Árboles que son parte esencial de la declaración de Patrimonio de la Humanidad, por más que no sean centenarios, son intocables, más allá de intervenciones fitosanitarias.
Creo que es súper necesario dotar a cada distrito de una zona reconocible y disfrutable a nivel peatonal. Una zona para que el barrio se junte y celebre. Lo mínimo una por distrito, lo ideal es generar esto barrio a barrio.
Una vía principal de comercio local, algo así como la Calle Mayor de cada barrio.
No por favor, si es como la del Madrid de los Austrias será casi sólo asfalto, un infierno peatonal y estético.
Esta necesita una urgente peatonalización o en todo caso duplicación de aceras y dejar tan solo un carril.
Y frente a la Capitanía General y el Instituto Italiano hacer una plaza adoquinada con una bonita fuente en el centro, recuperando el monumento al atentado de la boda de Alfonso XIII.
Tengo sueños húmedos con esa reforma y la creación de esa plaza. Es tan absurdo tener la Calle Mayor como si fuese una carretera cuando a día de hoy el tráfico es tan exiguo… En concreto me gusta mucho tu propuesta. Rimaría muy bien con la Plaza de la Villa, creando dos espacios clásicos muy madrileños y especiales.