Entiendo es natural que un espacio tan céntrico y grande albergue celebraciones; al final, funciona como la plaza mayor del pueblo, donde siempre ocurre de todo. Además, la ciudad es tan extensa que dispone de múltiples plazas y lugares donde pueden celebrarse eventos simultáneamente, y eso no me parece mal. De hecho, considero que es positivo y hasta necesario utilizar los espacios públicos para las celebraciones especiales.
Ahora bien… lo que veo falta es criterio y calidad en lo que ocupa la plaza/ se celebra, con una selección muy cuidadosa de las fechas concretas en las que se va a celebrar algo. De este modo, cuando se organice, esto será representativo e importante.
Actualmente, este espacio está “prostituido” y ocupado el 90% del tiempo con todo tipo de eventos y ferias, sin ningún criterio. Algunas son meras copias de otras anteriores, donde se hace lo mismo pero con un nombre diferente.
Es fundamental establecer un filtro sobre qué se celebra y en qué fechas, y exigir calidad en lo que ocupa la plaza. Puedo entender que esté ocupada tres semanas en Navidad, una semana durante el Orgullo, diez días durante la Hispanidad, o una semana en San Isidro, o cualquier otra festividad importante. Pero no cualquier cosa o evento y uno tras otro. Además, hay que ofrecer calidad, ya que se trata de un lugar emblemático; de lo contrario, se está “prostituyendo” este espacio.
Yo cuando vivo en Madrid, paso con mucha frecuencia por ahí, y ver la plaza siempre ocupada con “tonterías” superfluas me produce dolor. Encima, termina una cosa y a los pocos días vuelve a ocuparse con otra.
La verdad es que no veo un criterio de calidad en lo que se hace. Cuando uno va a la Verbena de San Isidro o a La Paloma, ya se sabe lo que va a encontrar, y hasta es pintoresco y se comprende porque forma parte de su espíritu. Pero que en Plaza de España te planten cualquier cosa en cualquier momento… a mí, sinceramente, me parece demencial.
Yo solo celebraría fechas muy importante con fechas concretas y con unos criterios de calidad muy altos para que sea reseñable.