Buenas,
Estoy actualmente buscando una zona cerca de Madrid donde me gustaría vivir, y la verdad es que el panorama es desolador. Nada me gusta.
-
El centro es precioso pero carísimo.
-
Los barrios de alrededor son Francoblocks feos, con muchos problemas urbanísticos, poca zona verde y mucho comercio cerrado. Me genera además mucha inseguridad.
-
Zonas como Pozuelo o Majadahonda me llaman bastante, pero siguen teniendo muchísima arquitectura fea, calles larguísimas solo de muros de urbanizaciones y sin coche estás perdido.
-
Ya en la sierra el estar alejado no es un problema, pero es que los pueblos de la sierra son el feísmo gallego a la madrileña. Nada pega con nada, y lo peor es que, a pesar de estar en la sierra, apenas están diseñados para encajar con su entorno. Te puede encantar la sierra pero no vas a ver un bosque cerca de casa aunque vivas allí, tendrás que coger 10 minutos el coche.
Esto he visto que sucede casi sin excepción y el casi es una expresión de gracia, en toda España. Y habiendo vivido en Suecia me cuesta muchísimo encontrar algo que me agrade, quizá porque aún no logro asimilar que es imposible encontrar algo cercano a lo que yo considero belleza estética en la periferia de las ciudades españolas, a diferencia de en Suecia. Y creo que se debe a las siguientes razones:
- Coches everywhere: En España TODAS las calles tienen aparcamiento a los lados de la calle. En Suecia hay muchos lugares donde no, y el espacio se cubre con un carril bici o directamente con árboles y cesped. De hecho esta falta de coches en las calles es de lo que más nos asombra cuando vamos a Japón. El absurdo llega hasta tal punto que en zonas donde apenas hay algunos pisos ha ristras enteras de aparcamiento donde nunca aparca nadie.
-Plataneros en las calles, pinos en el campo: Una de las cosas que me sorprende del campo alrededor de las ciudades es la poca variedad de especies que hay en él, y sobre todo la falta de arbustos y árboles de menor porte. Supongo que mucha culpa la tiene la elección del pino piñonero como repoblador. El problema es que no solo no es una especie muchas veces no perteneciente a la zona, si no que evita el crecimiento de nada a su alrededor y a la hora de pasear y disfrutar del campo lo convierte en un lugar poco apetecible, sobre todo cuando se junta con la escasez de lluvia que históricamente nos afecta. En la ciudad todo son plataneros, y no hay ni un solo parque que se aproxime a lo que es El Retiro en ningún lugar. Zonas como Majadahonda o Pozuelo no tienen un solo gran parque paseable. Sí, alguno hay, sobre todo en Pozuelo, pero no intentan nunca crear un espacio natural. Solo ponen caminos en secarrales con algún árbol y eso ya cuenta como parque. Además, como digo, las ciudades viven sin mirar a la naturaleza. Pongamos como ejemplo el propio Pardo, cerrado durante casi medio siglo para proteger la biodiversidad, cuando, a mi juicio, podría estar protegida igualmente con incluso libre acceso por parte de los ciudadanos. ¿O es que los suecos son tan distintos a nosotros que pueden ir a Tyreso a dormir incluso allí y a nosotros nos ponen vallas para no poder acceder? Mirad el Monte del Pilar entre Pozuelo y Majadahonda, que podría tener muros con límites concretos que podrían adecentarse, podría aquello incluso irrigarse como un gran Retiro porque pasta ambos municipios tienen, construirse carriles bici, etc etc. Pues nada.
-
En Madrid somos gatos con razón: Además es que en Madrid tampoco hay agua, ni se ha buscado nunca crear espacios donde se puedan unir embalses con pueblos (Para evitar que se muera una persona al año tenemos en zonas como Manzanares el real, Valmayor o incluso molino de la hoz (Lo más integrado que ha hoy en toda la región) vallas. Vallas en vez de hacer paseos para ver el embalse. En vez de construir “en primera linea de embalse”, es decir a 20 metros de la orilla) para crear paseos con vistas donde correr, tomar algo etc. De nuevomirando contra la naturaleza.
-
Arquitectura muy fea: El problema de la arquitectura es que se vuelve mucho más importante cuando no hay naturaleza cerca. Y claro, vayas a donde vayas no ves belleza. Sí ya en los pueblos del sur de madrid y Toledo, donde se ha empezado a construir más tradicional, pero no aquí. Y aun así pasaría como pasa en Suecia u otros lugares si el espacio púbico fuese para el peatón y para quien vive. Pero nada, plazas llenas de coches, aceras minúsculas en los centros urbanos… En fin, desastre. Y las casas, sobre todo en los pueblos de la sierra son de su padre y de su madre. Lo único decente acaban siendo las urbanizaciones de las zonas ricas, que no es que sean bonitas. Es que al menos están rodeadas de verde, y claro, como hemos visto, eso las mejora.
-
Transporte público ferroviario inexistente: Qué vamos a decir. El Cercanías, desde Aznar, no existe en España. Y menos aún en Madrid, que no manda al Congreso diputados nacionalistas. Pero vamos, que es igual en casi cualquier otro sitio del país. Coche o muerte. Eso sí, luego la legislación la hace quien vive en Malasaña o Salamanca con metro en la puerta.
Por eso me resulta, y quizá me equivoco y simplemente echo mucho de menos aquello, dificil elegir algún sitio que realmente me guste para desembolsar la mayor cantidad de dinero de mi vida.
Un desastre.
Saludos cordiales.