Elevada sobre un basamento de hormigón, la pieza está desdoblada en dos facetas. La primera presenta balcones continuos donde se muestra la estructura de madera, que miran a un nuevo jardín de lavandas. Estos sirven de antesala a la contigüidad de salones y cocinas que reciben iluminación natural a través de paños vidriados. La segunda faceta alberga los dormitorios, protegidos por listones verticales y entalladuras horizontales de una madera ennegrecida.
Viviendas de protección oficial Azucarera en Tudela FRPO
La promoción, que abarca 4.967 metros cuadrados, incluye viviendas de dos y tres dormitorios, con superficies que oscilan entre los 60 y los 90 metros cuadrados, y cuentan con trastero y garaje. El diseño, con un esquema de patio interior y viviendas compactas en los perímetros, permite que los salones, ubicados en las esquinas, disfruten de dos orientaciones.
Para albergar el Instituto Nacional de Industrialización y Robótica de la Construcción se ha previsto la rehabilitación de dos naves existentes situadas en un lugar estratégico en términos de conexiones urbanas e interurbanas, cerca de la Universidad Pública de Navarra y justo en frente de la futura Ciudad Circular y Polo Tecnológico de Navarra.
Qué poco ilusionan los proyectos tan feos, aunque sean tan grandes.
Pamplona tendrá en septiembre una residencia de estudiantes de 330 plazas
Stephouse está situada en las antiguas Misioneras del Segundo Ensanche y tendrá terraza ‘chill out’, gimnasio, sala de cine
Enhorabuena a 𝗢 𝗔𝗿𝗾𝘂𝗶𝘁𝗲𝗰𝘁𝘂𝗿𝗮 por “Pareten mintzoa” (Un diálogo entre paredes), proyecto ganador del Concurso de Ideas de Pamplona para el 𝗖𝗲𝗻𝘁𝗿𝗼 𝗱𝗲 𝗜𝗻𝘁𝗲𝗿𝗽𝗿𝗲𝘁𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗣𝗲𝗹𝗼𝘁𝗮 𝗩𝗮𝘀𝗰𝗮.
Según el jurado, el proyecto acierta con la implantación del edificio, integrándolo en su entorno y generando una gran plaza abierta a la muralla.
Los autores destacan que el diseño evoca los frontones como espacios de encuentro.
Un acierto lo de que hayan puesto una pared en la que se pueda jugar a pelota en un centro de interpretación sobre ese mismo deporte.
Aún así, hubiera estado bien que plantearan ese espacio como uno en el que se pudiera jugar durante todo el año. Tal vez techándolo y no acercando la hierba hasta el borde de la pista, para lograr que se pueda jugar con lluvia y no se embarre a la primera de cambio. Y ya por rizar el rizo, un frontis oficial mide en torno a 9 metros entre la chapa superior y la inferior (10 metros desde el suelo), no sé si el del proyecto cumple las medidas.