Hospital Universitario de La Princesa

El Hospital Universitario de La Princesa, ubicado en pleno Barrio de Salamanca, es una institución clave dentro del sistema sanitario madrileño, tanto por su historia como por su papel actual como centro hospitalario de alta complejidad.

Su origen se remonta a 1852, cuando la reina Isabel II ordenó su construcción como muestra de gratitud por haber sobrevivido a un atentado. El hospital fue nombrado en honor a su hija, la infanta Isabel"La Chata". En sus primeros años, el hospital se ubicó en el Paseo de Areneros (hoy calle Alberto de Aguilera), donde fue inaugurado en 1857.

Durante la Guerra Civil, el centro fue trasladado al Colegio del Pilar, operando bajo el nombre de Hospital Nacional de Cirugía. Posteriormente, cambió varias veces de ubicación hasta asentarse definitivamente en su emplazamiento actual.


Ilustración del antiguo hospital. 'El museo universal0 1(8). Publicado en 1857.

El hospital que hoy conocemos fue inaugurado el 3 de noviembre de 1955 en la calle de Diego de León, sobre una manzana completa delimitada por las calles del Conde de Peñalver, Maldonado y General Díaz Porlier. Su diseño fue obra del arquitecto Manuel Martínez Chumillas y respondía a una visión moderna para la época: ser el gran hospital estatal del momento.

En los años 70, las instalaciones ya mostraban signos de deterioro. Por ello, entre 1978 y 1984 se llevó a cabo una gran remodelación dirigida por los arquitectos Alfonso Casares Ávila y Reynaldo Ruiz Yébenes. Tras esta renovación integral, fue reinaugurado oficialmente por la Reina Sofía en 1984, recuperando su nombre tradicional.

Desde 1994, el hospital está vinculado a la Universidad Autónoma de Madrid, lo que lo convierte en un importante centro de formación para estudiantes de medicina y personal sanitario.

El edificio actual muestra ya claros signos de deterioro en las instalaciones, y está necesitado de una reforma que entre otros:
- mejore el aislamiento térmico
- modifique la tipología de las habitaciones y modernice los baños
- mejore el desplazamiento vertical en el edificio.
- reforme zonas de consultas, particularmente las ubicadas en las plantas subterráneas.

Por la ubicación del centro, el tamaño de la población a la que da servicio, y la tipología del edificio creo que una reforma en profundidad del mismo sería bastante complicada.

2 Me gusta

Comparto una interesante reseña histórica sobre el hospital que incluye interesantes fotografías de la construcción Hospital Genaral de la Beneficencia del Estado en 1905 y del actual edificio poco después de su inauguración.

Hospital que se debería ir reformando aunque sea a pequeños pasos de forma urgente… Y debo decir que está saturadísimo.

1 me gusta

Saturado, viejo, anticuado y necesitado de las comodidades de los hospitales más modernos. Y esos ascensores son una pesadilla.

Pero ¿cómo se puede reformar un edificio así, en medio de una zona residencial? ¿Cómo se le podría dotar de un nuevo núcleo de ascensores?

Voy a decir algo que no sé si es factible siquiera (ni técnica, ni asistencial, ni financieramente), pero creo que debería demolerse y construirse un hospital moderno en torre (como este), quizá con más altura y más plantas bajo rasante.

1 me gusta

Sí, suscribo todo lo que dices, también en lo difícil de proceder dada su ubicación, servicio, etc… Yo por eso comentaba lo de al menos modernizar y restaurar lo que se pueda en pequeños pasos, pero también complicado ya que se podría eternizar con los inconvenientes que conllevaría.

1 me gusta