En distintos hilos del foro terminamos chocando siempre con problemas que parecen tener un único origen.
Se trata de la incapacidad del sistema actual de planear y materializar soluciones a cualquier de los problemas que existen en España y otros países.
- vivienda
- educación
- transporte
- medio ambiente
…
La lista sigue y sigue, aparentemente empañando todo o casi todo.
Aunque exista consenso entre profesionales en las causas del problema o incluso en las soluciones o estrategias a adoptar, los políticos son incapaces de pactar soluciones entre distintos partidos, de ofrecer planes integrales, de sobrepasar el enfoque electoralista a cuatro años y dejar de lado la vulgar compra de votos (ayudas directas, gratuidades, etc.).
Yo personalmente observo como en España han ido desapareciendo Planes, Agencias e Institutos con una dirección más técnica e interna, para dejar sitio a cada vez más políticos.
Parece que este podría ser un problema generalizado. La insatisfacción con la democracia realmente existente en los países ricos no deja de aumentar.
Estudio:
Rising dissatisfaction with democracy in high-income nations | Pew Research Center
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Madrid
Creo que lo que sucede por ejemplo en Madrid, que es lo que más sigo, es paradigmático.
- se desmantela el IVIMA
- se reduce el número de viviendas sociales total respecto a los años 80.
- no hay plan metropolitano
- parece que no hay un plan de movilidad que se siga
- Patrimonio de la Humanidad para Prado Recoletos y no saben ni qué hacer
- se abandona el procedimiento de concursos de ideas
- se abandonan los planes y estrategias aunque ya hubiera comenzado su materialización
…
Proyectos o procesos que si fueron posibles en los 80 y 90 (reforma y mejora del Centro, enfoque metropolitano…) hoy se me antojan sencillamente imposibles, extraterrestres.
Todo se reduce a “pet projects”, parches, “cositas”.
Desde los puestos de poder se apuesta por la politización y polarización forzadas, y se abandona progresivamente la gestión.
Con todos los problemas y potenciales en este momento crítico de la ciudad, los temas de actualidad política son:
- Milei
- El cartel del orgullo
- La mujer del presidente
- El novio de Ayuso
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España
El Gobierno nacional anda similar. Casi todo lo que sacan adelante es la nada, papel mojado.
- ningún plan real ni tangible para solucionar la crisis de la vivienda
- la Ley de Calidad Arquitectónica, papel mojado
- apuesta por soterramientos y AV, populares electoramente, entre políticos y asociaciones locales, frente a Cercanías, medias distancias y mercancías (mucho más utilizados, transformadores y necesarios)
- la incapacidad de solucionar de manera integral problemas medioambientales en Doñana y el Mar Menor, adoptando soluciones parciales
Y ni se han llegado a abordar
- la pobreza de las generaciones más jóvenes
- la crisis de la natalidad
- problemas de desequilibrio territorial
…
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El problema es de base y viene de hace 50 años con la transición. Está ya muy arraigado en la política y hasta en la cultura española y es la corrupción. Los políticos en España no trabajan para el pueblo, habrá alguno que se salve, pero estos no llegan a las altas esferas de la política y si llegan han perdido esa vocación hace tiempo por culpa del sistema. La política en España es la nueva aristocracia y como antaño consiguen poder con cuchilladas en la espalda, ganar favores, desprestigiando, etc, cada uno tejiendo sus propias redes clientelares para obtener el voto inquebrantable.
Hasta que no se arregle este problema de base, los demás no tienen sentido y la gran parte de la culpa la tenemos los que estamos fuera de la política y votamos, que vemos caso tras caso de corrupción de todos los partidos y no pasa nada porque nos alivia que no sea del partido al que votamos y nos alegra que sea del que odiamos, como si fueran goles en un partido de fútbol.
El tema es tan amplio que yo creo que tiene difícil solución. Lo que elige un país en política es el reflejo de su sociedad y en el parlamento, muy a mi pesar, la inteligencia, el mérito, la decencia y la bondad brillan por su ausencia.
La única solución que veo es una reestructuración completa del sistema democrático y la política y los políticos no van a hacerlo porque se les acaba el chollo.
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Estoy parcialmente de acuerdo, pero no creo que sea un problema exclusivamente nacional.
Solo hay que ver los resultados electorales en Europa para saber que la gente en general está bastante desencantada con la política.
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¿Cimentar una línea responsable?
Sistema
Aristóteles ya conceptualizó la distinción entre democracia y una desviación corrupta de la misma, la demagogia.
El primer punto es ese: no podemos olvidar la posibilidad de que degenere y se corrompa el sistema.
Juntemos esto con la lógica propia del sistema capitalista, en la que las empresas con más capital tienen un peso político innegable, la actividad lobística es cada vez menos discreta y más descarada.
Especialización
Por el otro lado, nuestras economías y sociedades son cada vez más desarrollas son, a la vez, cada vez más complejas, con oficios y ramas profesionales más concretas y específicas.
Situación actual
Se da una situación paradójica: una política habitualmente populista (¿cada vez más?) y desligada de todos los círculos profesionales.
Parece que se ha vuelto habitual no tener ni un proyecto generador de base técnica. Ni planes, ni estrategias, a los distintos niveles.
- planes territoriales
- plan hidrológico
- plan forestal
- planes metropolitanos
- planes de vivienda
- planes de movilidad
- planes económicos
- de educación
…
La política, del día a día, se concreta al margen de muchos planes profesionales y técnicos.
Muchas veces se anuncia el plan, pero el contenido es vacío, sin ninguna estructura técnica y a largo plazo: medidas banales, vistosas, pet projects.
Pregunta
¿Como conseguimos que tener una política menos influenciada por los grandes lobbys?
¿Como conseguimos que la política vuelva a estar más conectada con un mundo de técnicos y especialistas cada vez mayor?
Leía hace poco que en EEUU la NASA o la Defensa ya no trazan sus objetivos y programas en función de lo que digan sus especialistas o “los intereses de la nación”.
El dinero va a programas que ahora ya diseñan directamente las grandes empresas adjudicatarias (proveedores, fabricantes de armas, de cohetes), por absurdos o poco prioritarios que sean.
Es una situación totalmente corrupta.
