Es como si en la integración del espacio que dejó el Muro de Berlín, muro que se puede parecer al impacto de una autopista que atraviesa una ciudad, simplemente hubieran hecho parque y no aprovecharan para crear también plazas, centros comerciales y de negocios, en definitiva, soldar los dos cachos de la ciudad.
Proyectos que aparecieron en el vacío que dejó el muro de Berlín.
El muro constituía una franja que atravesaba la ciudad, a veces del ancho de una avenida y otras del ancho de una manzana entera, una entidad y configuración parecida a una autopista en un entorno urbano.
Primero, lo generado corresponde con lo que vemos de color anaranjado en esta fotografía. Un eje urbano nuevo muy potente.
Potsdamer Platz
Con su Sony Center
Más adelante apareció el monumento al Holocausto de Peter Eisenman.
En el encuentro del vacío que dejó el muro con el Spree surge el Band des Bundes, una franja de edificios institucionales que sigue en ampliación.
En el espacio que dejó tras de sí la división, de la Hauptbahnhof, está surgiendo el Europacity, un nuevo centro de negocios.
Todo esto ha surgido acoplando operaciones siguiendo la estela del nuevo espacio que generó la desaparición del muro.
Es curioso que hay fotos del muro en las que, insisto, parece una autopista.
No me quiero enredar ni ser pesado, pero estas transformaciones no se deberían limitar a hacer un parque.
Me preocupa que el abandono de procesos y métodos que aseguren profundidad y calidad de lo que se proyecta por parte del Ayuntamiento madrileño imposibilite operaciones así de complejas y completas. Basta ver lo que ha sucedido en el Mahou Calderón o va a suceder en Carabanchel, de las localizaciones más estratégicas de la ciudad con proyecto completamente mediocres, malos, autistas por ajenos a lo que pasa alrededor, ¿solucionan algo a nivel ciudad?.
A mí me da pena, porque en el fondo ya empiezo a aceptar que series de proyectos como las de Berlín, en gran parte costeados por entes privados, son imposibles aquí, y no es ni por talento y ni por capital. Espero equivocarme.