Portazo deinifitivo:
El Hermitage se despide de Barcelona
Los promotores del museo en la capital catalana centran sus esfuerzos en el frente judicial con el Ayuntamiento para una indemnización por el bloqueo
Fuente: El Hermitage se despide de Barcelona | Cultura | EL PAÍS
Se ha hablado y escrito mucho de masificación turística, de los problemas de movilidad, de la supuesta falta de vinculación del museo con la ciudad y de la viabilidad económica y muy poco del contenido.
Ciertamente, en todo este tiempo se ha hablado y escrito mucho de masificación turística, de los problemas de movilidad, de la supuesta falta de vinculación del museo con la ciudad y de la viabilidad económica –inversión 100% privada y, asegura Pinadell, sin riesgo de que la administración pública tenga que pagar rescate ni subvención algunos en caso de fracaso– y muy poco, casi nada, del contenido del Hermitage barcelonés. Un déficit atribuible no solo a quienes han bloqueado la iniciativa con todas las argucias políticas y administrativas posibles sino también a sus propios impulsores que, víctimas de lo que califican un “perfil discreto” premeditado, no han sabido comunicar la oferta artística y cultural con la que pretenden seducir a los barceloneses. Ayer, además de recordar que el museo del puerto podría disponer –faltaría ver en qué medida y condiciones– del segundo mayor fondo de obras de arte del mundo, el representante de los inversores garantizó que el Hermitage del puerto tendría un sello genuinamente local y proyectaría una “marca propia de Barcelona” al resto del planeta.
Fuente: El proyecto del Hermitage en Barcelona, historia de un disparate